viernes, 24 de julio de 2009

Poéticas del fragmento.

La Casa de la Musica En pocas palabras se dice que Koolhaas recicló el proyecto de una casa unifamiliar que estaba diseñando en ese momento y que su cliente rechazó, y que constaba en una cáscara dura en cuyo centro se ubicaba el corazón íntimo de la vivienda. Exteriormente, el edificio rompe con su entorno comportándose como una escultura urbana, una especie de caja deformada de concreto a la que se le han sustraído las esquinas en la base y algunos tajos generando terrazas. Lo que plantea Koolhaas es la existencia de un volumen sólido a priori en el cual, por medio de operaciones estratégicas, se abre espacio para el programa. Se remueve materia para crear espacio. El concepto negativo se presenta en el trabajo de Koolhaas como una oportunidad de hacer arquitectura basada en la substracción en lugar de la adición. Ésta es la idea central dentro de la concepción de la Casa da Música. Para este proyecto, OMA se acerca a la relación entre la sala de conciertos y el público tanto en el interior como en el exterior del edificio, considerando éste como una masa sólida del que han sido removidas las dos cajas que albergan tanto las salas de concierto como el resto del programa público. El resultado es una masa perforada por el programa.
Consecuencia de esta lógica de excavación, el interior se muestra a la ciudad sin caer en una forma didáctica; al mismo tiempo, la ciudad se expone hacia el público en el interior. Estos elementos distinguen la Casa da Música de la mayor parte de las instituciones culturales, generalmente frecuentadas por una parte limitada de la población, y cuya actividad interna suele ser exclusivamente conocida por una minoría. Los espacios restantes entre el programa público están destinados al servicio: foyers, un restaurante, terrazas, cuartos técnicos y sistemas de circulación vertical. En las intersecciones de estos espacios negativos y de los espacios restantes se crea una ruta pública continua hasta los últimos niveles rodeando el gran auditorio por medio de escaleras y plataformas, logrando con ello una auténtica aventura arquitectónica.
link: http://www.youtube.com/watch?v=WOd5TNGMbxw





Arquitectura y Sociedad. Decálogo hacia la fragmentación de una arquitectura. Principios de un manual distinto de construcción. La arquitectura es provocación, devoción, orden y desorden; leer, ver, sentir y opinar. De las opiniones salen verdades, que no son solo una, sino que pueden ser varias a la vez y pueden no serlo. Ellas no interesan solas separadas e inertes. No valen nada sí se las deja uno dentro. Sirven cuando se entrecruzan como hilos en la trama: pedazos o fragmentos de verdades que se convierten en otras nuevas. Así es la fragmentación y así como la imaginamos cruzando por entre el hacer de la arquitectura.
· Eso que llamamos fragmentación no es sólo separación; es construir de los trozos de arquitectura otra diferente. No hay mas fragmentación que aquella que podamos crear y creer; imaginar y compartir. Más vale creer y hacerse servir de todos los fragmentos y en ninguno a la vez; ya sea todos juntos o por separado.
· Los fragmentos no son sólo imágenes. La fragmentación no es nada más ver cosas separadas y rotas. Debe ir más allá de lo simple y evidente. La imagen debe ser el producto de una vista global de todas las partes. Un paseo interior de lo que se construye. Paradas obligadas en sus espacios, en los materiales con que está hecho, en las personas que lo habitarán, las que lo verán, aprenderán de él. Un paseo fotografiado sin cesar ni perder detalle por la imaginación del que ha construido con las intenciones más profundas y también, porque no, en las más superficiales.
· De lo roto y casi destruido se han levantado grandes pueblos. De los restos mal usados, descuidados y derruidos durante las infamias y no-infamias de los hombres se ha construido nuestra especia. ¿Porqué ahora tendría que ser negativo construir de esta manera? Negativo es solamente ver las ruinas. Lo importante es hacer crecer ese fragmento hacía una totalidad nueva y diferente.
Recuerdo las almohadas de mi tía abuela Teresa. Las hacía de todo un mundo de tela que había utilizado. Las hacía pensando en que su belleza radicaba en el no-desperdicio, radicaba en ser ellas mismas objetos de una belleza útil hechos con pedazos de recuerdos, trozos de historia, cariño, amor, añoranza, nostalgia y esperanza de lo 'nuevo'. Le daba posibilidad de utilidad al tiempo.

La superposición de fragmentos por Josep Maria Montaner Publicado en La Vanguardia el 2 de febrero de 2005. Los holandeses del equipo MVRDV practican una atrevida investigación formal que se basa en la fragmentación llevada al extremo, plasmada en proyectos y obra construida.Si en el panorama arquitectónico holandés de los años ochenta fue clave la irrupción de Rem Koolhaas y su equipo OMA, iniciándose una nueva etapa tras la época de predominio de autores como Aldo van Eyck, Piet Bloom y Herman Hertzberger, en los años noventa se extendió su influencia con la aparición de muchos equipos de arquitectos jóvenes inspirados en la experimentación formal de Koolhaas. Silodam es un excelente ejemplo de uno de los conceptos desarrollado por MVRDV: la idea del corte libre. Como sucede en una de sus obras mas famosas, Villa VPRO, el espacio no fluye solo en sentido horizontal, sino que se extiende en forma vertical por medio de los pisos que se curvan y pliegan como olas de hormigon. Esta idea constituye un paso mas alla de lo experimentado por los arquitectos modernos con la planta libre. Tanto en Silodam como en Villa VPRO la fachada no fue diseñada como muro sino como expresion del corte.





…”Me interesa la fragmentación como reacción a la complejidad de un programa, por oposición a la propuesta de un sistema autosuficiente, ¡demasiado autosuficiente! En la ciudad existe naturalmente esa fragmentación…Aunque, bueno, recientemente parece existir cierta tendencia de la estructura urbana a que cada unidad contenga la complejidad que anteriormente era exclusiva del organismo completo. Yo creo que esta fragmentación se ha forzado con consecuencias negativas para la ciudad…pero, en fin, esto no disminuye mi entusiasmo por las ideas y algunas obras clasificadas como deconstructivistas…””Alvaro Siza Salvando las turbulencias: Entrevista con Alvaro Siza por Alejandro Zaera.EL Croquis, nº 68-69, Madrid 1994

No hay comentarios:

Publicar un comentario